El precio del cobre cerró la semana en US$4,54 por libra, con un aumento de 1,2% respecto a la semana anterior. Con esto, el promedio anual se mantiene en US$4,32 por libra, lo que representa un 4,6% más que el mismo período, en 2024.
Los inventarios en la Bolsa de Metales de Londres (LME) se estabilizaron, con leves salidas y un incremento de cancelaciones de warrants, especialmente en Corea. Este cambio de tendencia fue percibido como una señal de próximos retiros físicos, lo que eleva la cotización. Por el lado de la oferta, un accidente subterráneo provocó la paralización temporal de la mina Grasberg en Indonesia, una de las más grandes del mundo. Esto generó un riesgo adicional de disrupción, lo que sumó presión alcista a los precios.
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