Durante esta semana, el precio del cobre cerró la semana en US$ 4,3 por libra, con un alza semanal de 1,2 % respecto del cierre anterior.
El precio tuvo una leve alza, en respuesta a la debilidad del dólar. A esto, se sumaron temores de escasez de oferta, debido a caídas en la producción de importantes empresas mineras. Por otro lado, la Reserva Federal decidió mantener sin cambios la tasa de interés, aunque advirtió sobre el riesgo inflacionario derivado de los aranceles a productos chinos, lo que ha enfriado las expectativas de recortes de tasas en el corto plazo.
Por el lado de la demanda, las importaciones chinas de cobre refinado se mantuvieron estables en abril, mientras que las compras de concentrado marcaron un máximo histórico, impulsadas por la expansión prevista de la capacidad de fundición en el país.
Con ello, el promedio anual del metal alcanzó US$ 4,22 por libra, situándose 6,2 % por encima del promedio en el mismo período de 2024.